jueves, 28 de octubre de 2010

Cuando se deja de escribir.


Cuando se deja de escribir, es porque se acaban las palabras, cuando la voz no sale por tu boca y el silencio inunda tu cuerpo, es porque la soledad va cubriendo tu mente. Esa soledad que cada día se acentúa más, se va agarrando a tu ser, sin dejar aliento, te ahoga, te oprime la garganta, hasta hacerte sentir un dolor tan inmenso y un vacío tan enorme, que te deja sin pensamiento, sin sentimiento.

Sólo con ése sentimiento de culpabilidad, de inferioridad, de tristeza…, y donde todo es oscuridad, sin dejarte ver ni un rayito de claridad.
Poco a poco la alegría se va perdiendo, la ilusión se va apagando, todo da igual, nada importa, sólo ves una cosa… la soledad.

Van pasando los días, los meses, incluso los años, siempre o casi siempre en esta oscuridad. Y un día, ya llegada la primavera te volví a encontrar, de una manera distinta, comenzamos a charlar, a sonreír… y volví a ver ese rayito de claridad. Fuimos tratándonos Ya nos conocíamos, aunque éramos dos totales desconocidos, este reencuentro todo lo cambiaria, nuestra visión de cada uno de nosotros, harías que mi soledad se fuera alejando, que volviera a tener ilusión y ganas de vivir… hoy por hoy cada minuto que estamos  juntos es un nuevo aliciente para mi, por eso desde lo más profundo de mi ser darte las gracias quiero, y decirte que eres mi rayito de claridad…  siempre dando luz a mi soledad.

Isabel Martínez.

3 comentarios:

  1. Ole ole y Ole, nada mas que añadir señoria.

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  2. Creo que yo encontré a esa persona.


    Saludos :)

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  3. eso está muy bien duenda, me alegro muxo por ti, ya he visto que has estado rodando un peli

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