Hoy os dejo un poema que me ha enviado un amigo de nuestro blog, Jorge Maseda, para mi es un placer poder compartirlo con todos vosotros y espero que os guste como a mí.
Si me dices odio al revés te juro que me oirás orientar
un occidente y volver a Asturias, seas tu o el Himalaya.
Paseas desde aquí la Guardia como una oruga noctámbula
que paulatina la opacidad de las montañas, detrás queda
el humo asmático de aquél cigarro. Huele a tomillo y llega,
llegó como gallega, en la ahorcajada de un caballo,
amazona como la guerra. Y llega, y llegó. Pero cojeas de
las fronteras, vas caminando Os Cañois, como una línea
de níquel que deja el filo de un céntimo rayado. Podría
llegar a los nervios premolares de tu boca más prolongada.
Hoy, de un duelo a otro, de un pato a pato, hay fuegos
fatuos y atalayas y fantasmas que mastican margaritas,
y un grillo afónico que, erre que erre, le canta eufórico
a la curvatura de la tierra…
Jorge Maseda.
el placer es mío
ResponderEliminares un privilegio estar aquí
gracias, gracias, gracias!
saludos jorge me alegra q estés bien y contento por la entrada
ResponderEliminarenhorabuena Jorge, es un poema muy hermoso
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